Crujiente de queso y cebolla

Crujiente de queso y cebolla

Hay recetas que son adictivas, y ese es el caso de la que hoy os traigo. Me llamó la atención por su sencillez y vistosidad, y ya sabéis que si algo caracteriza a este blog es la nula complicación de sus recetas. El remate fue cuando la probé y tuve que frenarme para no acabar con todo yo sola, señal de que ese plato voy a prepararlo con bastante frecuencia. Si os gusta la cebolla tanto como a mí, os va a encantar.

Crujiente de queso y cebolla

Crujiente de queso y cebolla

Ingredientes

  • 1 lámina de masa quebrada
  • Mezcla de quesos rallados (unos 200 gramos aprox)
  • Hierbas aromáticas secas (yo utilicé una mezcla de provenzales y orégano)
  • 1 cebolla grande
  • 50 gramos de mantequilla con sal cortada en cuadraditos pequeños

Crujiente de queso y cebolla

Elaboración

  1. Sobre la rejilla del horno ponemos una hoja de papel de hornear o un silpat y encima colocamos nuestra lámina de masa quebrada.
  2. La cubrimos con el queso rallado.
  3. Espolvoreamos con las hierbas aromáticas.
  4. Con una mandolina o con un buen manejo del cuchillo, cortamos la cebolla en rodajas muy finitas y las ponemos cubriendo toda la lámina con el queso.
  5. Distribuimos los cubitos de mantequilla sobre la cebolla.
  6. Horneamos en horno precalentado a 175ºC hasta que la cebolla esté dorada.
  7. Dejamos enfriar sobre una rejilla y partimos en cuadrados.

Notas:

  • De una lámina salen unos doce cuadrados. Si no los devoráis todos, podéis guardarlos en un tupper y tomarlos al día siguiente, yo lo hice calentando a máxima potencia una sartén grande y poniéndolos en ella dejando que se tostara un poco la base hasta coger un poco de temperatura. Quedaron igual de ricos o más.
  • Con esta idea podéis también preparar este crujiente con otro tipo de verduras  siempre y cuando no sean muy húmedas para que la masa no pierda su toque crujiente.

Gloria.